No he llegado a conocer a alguien
que trabaje gratis… Todo en esta vida tiene un precio, y aunque el trabajar de
algo que te gusta, lo haces todo con pasión, también se trabaja por un valor
monetario, debemos de saber cuál va a ser el precio de este trabajo. El darle
precio a nuestro trabajo, facilita la vida de los demás.
Cuando alguien se dedica a
estudiar una carrera universitaria, quiero llegar a suponer (o es solo mi
creencia), que nuestro fin es poder tener un negocio propio de nuestro gusto
y/o trabajar en una prestigiosa empresa orientada en nuestro ramo, algo de
nuestro interés, sea la rama que sea.
En mi caso, como Ingeniera en
sistemas (casi) con especialidad en el área de ingeniería de software, debo de
tener en cuenta que es lo que voy a desarrollar, pero sobre todo, cuanto voy a
cobrar por esos desarrollos, algo considerable para mi mano de obra y también para
mi cliente, pues no voy a cobrarle la millonada por un pequeño sistemita de “Hola
Mundo”.
El cliente que solicite nuestros
servicios como desarrolladores siempre va a buscar algo económico y algo que
cubra sus necesidades, vamos, todos buscamos eso cuando se servicios se trata.
Después de empaparme un poco de
opciones que tengo para poder llevar a cabo el desarrollo de un sistema, pude
descubrir que si voy a impartir mi propio negocio, para no meterme en problemas
legales, tengo que registrarme ante el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF). Este
régimen es para personas físicas que imparten su propio negocio aún sin un título
(yo aún no cuento con uno, cuando ya lo tenga, mi régimen fiscal será otro).
Cualquier otra persona que no
cuente con un título, puede hacer uso de ese pequeño régimen, el cual incluye
ahora a los REPECOS, y se emiten facturas electrónicas acerca de los servicios
que prestan.
Para poder hacer cobro del
sistema que se me sea solicitado, debo de tener en cuenta conceptos que quizás no
muchos conocemos como por ejemplo, aparte de la mano de obra, tenemos que ver
el recurso que utilizamos para realizar este desarrollo, en este caso, la
computadora y la luz que gasta esta, las horas invertidas, ocupo saber también si
tengo que comprar alguna licencia de la plataforma que utilizare para programar
así como la de la base de datos que utilizare, o si es un proyecto web, la
obtención de mi dominio y su soporte.
Es importante conocer los
conceptos que voy a necesitar para desarrollar mi servicio y no nada más
aventarme así porque sí.
Nuestro sistema debe de realizar
por completo todas las operaciones solicitadas por el cliente para que ayude a
la empresa a tomar mejores decisiones y a desarrollar mejor sus funciones. Y si
sus decisiones respectan al dinero obviamente todos tenemos que buscar una
mejor economía, ellos en la implementación del sistema para mejorar sus
ingresos y yo en la implementación y funcionalidad perfecta de este sistema para
recibir un buen pago y que valga la pena.
Para el desarrollo de nuestra aplicación
debemos de tomar en cuenta si el cliente tiene conocimiento en el área o no,
tanto en el área de su trabajo o donde se implementara el sistema, les explico
porque:
1) En
su área: el cliente necesita conocer acerca de su área para saber qué es lo que
realmente va a pedir en el sistema, ¿se imaginan alguien que no conozca del
todo los procesos de su propia empresa? Puede llegar a suceder, por eso
necesitamos a alguien que conozca indispensablemente en proceso de la a A la Z
para poder realizar el sistema.
2) En
nuestra área: si el cliente conoce de nuestra área, quizás sea más fácil que
nos demos a entender con él y que detalle mejor lo que necesita en su sistema. Obviamente
si el no conoce de desarrollo o bases de datos, también debemos de cuidar el no
hacer pasar al cliente como un tonto o aprovecharnos de él, tarde o temprano se
descubren las cosas y cuando nos descubra, bueno, hasta tendremos que cargar
con una demanda o una mala recomendación, aunque sea algo que el haya permitido
o aceptado.
Conocer acerca de estos temas puede
ayudarnos bastante, ya que tomamos en cuenta cuanto tenemos que cobrar sin
excedernos o exprimirnos en cuanto a cuestiones de desarrollo y económicos, y así
no dejamos que el cliente que ya tomó la decisión de elaborar su proyecto con
nosotros, se valla con la competencia solo por no tener conocimientos en el área
administrativa.
Y no solo en el área de
desarrollo, en todas las áreas que nos den la oportunidad de ofrecer un
servicio, más vale informarnos para no fallar como profesionistas, conservar la
ética, esos pequeños detalles son los que nos hacen crecer profesional y
moralmente… ¿Quién no quisiera en el mundo a unos profesionistas excelentes en
cuestiones de responsabilidad social y comprometidos con ejercer con la mejor ética?